Autor: Fray Melchor de la Serna
Soñaba una doncella que dormía
con un galán que amaba tiernamente,
y que en él todo andaba diligente
y descuido ninguno no tenía.
Ella, aunque mal, al fín, se resistía,
diciendo:”¿Qué dirá de mí la gente?”,
en efecto cumplíó con su accidente,
dando los dos remate a su porfía.
El galán la besaba y la abrazaba
con más calor que un encendido leño;
lo dulce a derramar no comenzaba,
cuando de despertó, y le dijo al sueño:
“¿Durar un poco más, qué te costaba,
pues para mí era gusto no pequeño?”